Aplausos a las ocho de la tarde ( Tiempos del Coronavirus)

Por la mañana he oído en una cadena de radio, donde la gente llama para hablar de sus experiencias en estos días,  como un padre explicaba que tenía una hija de 2 años , que se llama  Rosalinda ( no es este su nombre , es uno de estos modernos  sin género) y que cada noche antes de las 8 descuelga el teléfono , hace como si hablara con los vecinos  y dice: Rosalinda se ha portado muy bien hoy  , ya podéis salir a aplaudirla.

Entonces salen los padres con la niña , que se pone muy contenta al recibir los aplausos de los vecinos. La preocupación del padre es que pasara el día que esto pase y su hija no tenga aplausos. Como la consolara si piensa que se ha portado mal.

 El locutor de la radio se solidarizaba con el padre y contaba la historia con voz angustiada , para que fuera mas real o por empatía , esto no lo sé.

A ver , es que no hemos aprendido nada. Lievamos casi un mes hablando de solidaridad, de apoyo moral, de ayuda a los demás y resulta que seguimos criando los niños como reyes  absolutos. Los únicos reyes que deben entrar en las casas son los Reyes Magos . Prepararos puede  que el próximo año les tengáis que contar a los niños que este año los Reyes Magos  se han tenido que ir hacia el Extremo Oriente,  porque allí hay muchos niños que los esperan sin coronavirus en su país. Habra que explicarles  a los niños, que mientras nosotros aplaudíamos , otros tenían gobernantes que  trabajaban para salir de la crisis. Papa Noel tanpoco vendrá,  porque es un nórdico y por alli han reaccionado a tiempo.

No hubiera sido mejor explicarle a la niña que salen a la ventana para aplaudir a los médicos y enfermeras, como los que le pusieron a ella la vacuna de la triple vírica y que casi no le dolió.  Que  todos los sanitarios ( médicos , enfermeras, auxiliares, limpiadoras, celadores etc )tienen que quedarse en el hospital muchas horas , para atender a mucha gente, sobre todo a abuelitos, que necesitan una triple vírica. El resultado sería una niña  empática, solidaria, con amor al prójimo, con ganas de que todo vaya bien y pronto se cure todo el mundo que esta enfermito.

Todo esto me lleva a hablar de los aplausos. Voy a ser políticamente incorrecta ,  voy a confesar que yo no salgo a aplaudir.

En primer lugar porque se aplaude cuando algo te ha gustado  mucho. No puedo aplaudir que los hospitales estén llenos; que la gente llame al 112 y no la atiendan en horas; que si se  trata de una persona  mayor o con patologías ni los tocan de casa; que no hay tests para conocer si una persona esta  infectado y se hace a ojo; que la cifra de muertos es salvaje; que las familias no pueden despedirse de sus seres queridos; que la soledad llega a todos los rincones del país y que hay gente que la encuentran muerta en casa sin tener opción ni a una aspirina. Todo esto no me gusta,  por lo tanto no hay aplausos.

Algunos me diréis que se aplaude a los sanitarios,  que son héroes. No , no son héroes , no llevan capa con mallas y tanga, no tienen poderes . El poder que les han dado de decidir a quien va a utiliza el respirador y a quien se le deja a su suerte , maldita gracia que les debe hacer. Son profesionales , que igual que los astronautas no van con deportivas y palos de golf a la luna , ellos quieren trabajar con  batas, guantes ,  mascarillas para protegerse y no ser el colectivo  profesional con más bajas por coronavirus. También quieren camas de UCI, ventiladores, medicinas, pruebas diagnósticas , mas personal y a ser posible una vacuna cuanto antes, para solucionar este problemón con el que se enfrentan cada día.

En segundo lugar   estoy segura que lo de los aplausos no es un movimiento espontáneo. Los medios de comunicación nos bombardean cada día con la hora feliz, las 8 de la tarde. Antes del telediario donde nuestros grandes políticos nos hablarán de lo bien que lo hacen, nos darán cifras millonarias de dinero gratis. Cifras que a los profanos  nos parece mucho,  porque pensamos en términos de la cesta de la compra y todo lo que pasa de 100 euros es una barbaridad. 
Pensad que lo mismo que en los grandes almacenes nos mandan mensajes subliminales para que compremos más , ahora nos mandan mensajes,  bien directos,  en todos los medios de comunicación y en las redes sociales para que aplaudamos a las 8.
 Vamos pan y circo , como los romanos. Pan,  porque podemos ir a comprar al super y han jurado ( palabrita del Niño Jesús ) que no faltara nada de nada y circo porque en un país tan emocional  como el nuestro ( lloramos, hasta los ateos, cuando tocamos la peana del santo de nuestro pueblo) , salir a montar el número por la ventana , hablar con el vecino por la ventana, reírse del modelo de chandal del vecino de enfrente, ver a la guapa de al lado sin maquillaje y con celulitis ,  es un placer que se merece un rato de nuestro tiempo. Es un deshago en  nuestro encierro y ademas hacemos una obra de bien. Somos país de buenas intenciones.

Pensáis que tal sentaran los aplausos a aquellas personas que han perdido a un familiar o a un amigo y ni siquiera saben en que morgue está; en  como los recibirán los que debían estar en el cementerio enterrando a sus padres y están en su casa con las luces apagadas; como lo vivirán todas las personas que vieron como se llevaban un familiar y no saben ni si esta vivo. No, aplausos no, estamos de luto.  Con 15000 muertos , caiga cuando caiga la curva , habrá sido la tragedia mayor que habremos sufrido en varios siglos.

No nos podemos acostumbrar a 700 muertos diarios y a que no pase nada.  Alguien debe ser el responsable de no haber tomado medidas, no me vale que une digan : todos no hemos equivocado y entre todos saldremos. Cal curva esta pintada con un boli , pero representa personas.

No podemos ser tan egocéntricos y tan insensibles, no basta con unos aplausos .  No se trata de levantar el ánimo con mentiras , como la del padre de Rosalinda, se trata de enfrentarnos a la realidad,  a poner nombre a todos estos muertos  que se lo merecen, a tener respeto por el dolor ajeno.
A  prepararse que a las 8 quieren que salgamos a aplaudir.