Cervantes ¿Donde estás?

Desde hace unos días, en todos los telediarios nacionales presentan como noticia importante la búsqueda de la tumba de Cervantes, en el Convento de las Trinitarias de Madrid. 

Hay treinta personas trabajando en la cripta del convento. Llevan aparatos de última generación que se introducen en los nichos y buscan a un hombre de 69 años, con chepa, con 5 dientes y manco. Lo mas relevante de esta noticia es que murió hace 400 años. Pienso que la chepa ya habrá desaparecido, los dientes, si tenían caries (que no lo sabemos), se habrán desintegrado, y con los huesecitos que queden hasta podemos imaginarnos otra mano.

Un montón de profesionales, de gran importancia nacional, se dedican a este menester. Si El Quijote los viera les daría una zurra, seguro.

No entiendo qué interés tiene saber donde esta enterrado Miguel de Cervantes, ni que se gaste este dinero en buscarlo. No se ha cometido ningún crimen que sea necesario resolver.

Si Cervantes era un hombre religioso, ya estará satisfecho de haber recibido cristiana sepultura en la cripta de un monasterio y si no lo era, le importa un bledo donde se lo comieron los gusanos.

Lo que sí fue Don Miguel de Cervantes es un escritor, probablemente el mas importante de la literatura en lengua castellana. Lo que sí es seguro es que escribió el libro mas importante de la literatura en lengua castellana y uno de los libros mas importantes de la literatura universal: Don Quijote de la Mancha .

Estoy segura que lo que le  gustaría a Cervantes es saber  que  sus obras, cuatrocientos años después, se siguen leyendo.

Voy a hacer algunas propuestas para invertir este dinero de buscar huesos (creo que ya es tarde para que me escuchen, pero me desahogo) en algo que sí le importaría a Don Miguel de Cervantes.

Se podrían reeditar sus obras completas y mandarlas a todos los centros educativos.

Se podrían ilustrar sus Novelas Ejemplares y con una campaña de propaganda hacer que lleguen a los niños.

Se podría pagar a compañías de teatro para que representaran sus obras para  los niños de las escuelas.

Se podrían hacer lecturas públicas de sus obras en teatros.

Se podría hacer una edición de camisetas, lápices y otros objetos con los personajes del Quijote con diseños actuales. ¿A qué niño no le gustaria  tener un Sancho Panza si lo conociera?

Se podría hacer un videojuego interactivo con los personajes creados por Cervantes.

No soy muy buena lanzando ideas creativas, pero ya veis lo que quiero decir. Dejad que los restos de Cervantes descansen en paz y dedicad el dinero para acercar la obra de Cervanates a los ciudadanos.

Algunos pensaréis que la investigación es importante y estoy de acuerdo, pero habra que tener claro que es lo que se debe investigar. En una época de crisis, y aunque no haya crisis, lo que no se debe hacer es tirar el dinero. Conocer cuantas veces copulan los cangrejos de rio no es una investigación que  sirva para curar la hepatitis C,  ni vamos a encontrar la vacuna contra el Ebola con estas tonterias.

Los huesos de Cervantes no aportan nada a la comprensión ni a la divulgación de su obra. Él escribía para que lo leyeran y cómo estaría su chepa cuatrocientos años después le importaba un comino. A los muertos, mejor dejarlos descansar en paz.

Como soy malpensada creo que lo que ocurre es que hay que pagar el sueldo a unos investigadores, que hay que mantener contratados por intereses políticos. Algún político ha decidido que para demostrar que se invierte en cultura lo mejor es buscar los huesos de Cervantes.

Menos mal que Cervantes fue enterrado en un convento. Imaginaos que hubiese sido incinerado, y sus cenizas tiradas al Medietrráneo como está de moda ahora;  ya me teneis a todos los investigadores de España drenando el Mediterráneo para recuperar sus cenizas.