Scones (bollos escoceses)



Ingredientes

Para los scones
2 tazas de harina y un poco más para la tabla.
1/4 de taza de azúcar
Una pizca de sal
Una pizca de bicarbonato
1 cucharada de levadura
la ralladura de un limón
100 gr. de mantequilla bien fría
1 huevo
1/4 de taza de leche
1/2 taza de nata

Para el glaseado de limón
Una taza de azúcar glasé
2 cucharadas de zumo de limón


Modo de hacerlo

Tamiza los ingredientes secos. Mezcla en un bol la harina, el azúcar, la levadura, la sal y la ralladura de limón.
Incorpora al bol la mantequilla fría y trabaja la mezcla con las manos.
En otro bol mezcla la nata, la leche, el huevo y la vainilla. Se mezcla todo y se le añade la mezcla líquida a la mezcla seca anterior.
Integra bien los ingredientes. Si es necesario te pones un poco de harina en las manos para que no se pegue la masa.
Aplana y dobla la masa, creando capas. Repite el proceso varias veces hasta que la masa esté bien integrada.
Forma un rollo con la masa  y corta los trozos de unos dos centímetros de grosor. Quedan del tamaño de una galleta maría
Sobre una bandeja con papel de hornear pon los scones. Con una brocha úntalos con un poco de leche fría.
Precalienta el horno a 190ºC.
Se hornean a 190ºC durante 20-25 minutos, hasta que se pongan dorados.
Déjalos enfriar en una rejilla

Glaseado de limón

En un bol mezcla el azúcar glasé con el zumo de limón. Impregna los scones con el glaseado y deja que reposen durante una hora para que se endurezca el glaseado y se enfríen los scones.

Se sirven con mantequilla y mermelada.

Observaciones

Para la masa utiliza mantequilla bien fría y cortada en cúbitos pequeños. La mantequilla es la que hace que sean un poco hojaldrados. No debes amasarlos mucho porque la mantequilla se calienta y no se forma el hojaldre.
Cuando la masa está hecha (todavía cruda) puedes ponerle frutos secos o arándanos. A mi me gustan sin nada y servirlos después con un buen acompañamiento.
En Escocia tradicionalmente se aplastaba la pasta formando un disco de unos 3 cm de altura, después se cortaba en triángulos como si fuera una tarta y luego se horneaban estos triángulos. Así salen unos ocho scones.
Prefiero la forma redonda porque es más cómoda para rellenar y puedes hacer unos 10 ó 12 segun el diámetro del rulo.


Comentarios complementarios

Los scones son unos bollos escoceses muy populares en toda Inglaterra.  Se sirven con el té.
Al ser una receta popular encontrarás muchas versiones en Internet. Esta receta es muy fácil y salen muy buenos.

Los puedes servir con mantequilla y mermelada, con nata y también están muy buenos con crema de queso.
Son un poco dulces pero muy poco por lo que los puedes servir con algún paté o con salmón.
La ventaja de estos bollos es que no tienen que fermentar, por lo tanto se hacen muy rápidos y puedes guardarlos en una caja hermética de un día para otro.
Son ideales para una merienda con niños, pero no te olvides de los mayores porque también se los comen muy bien.

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